Resumen
Introducción. La educación médica debe organizarse teniendo como base la integración de la teoría y la práctica, siendo decisivo en la competencia clínica que el docente promueva un ambiente educativo que estimule en el estudiante el análisis, la reflexión y crítica basado en problemas reales.
Objetivo. Evaluar la aptitud clínica de residentes de medicina del deporte después de una intervención educativa participativa.
Métodos. Diez residentes (7 hombres y 3 mujeres, 29.5 ±1.69 años) de la especialidad de medicina del deporte de la Universidad Autónoma de Yucatán participaron en una intervención de 8 sesiones presenciales (una semanal, de 2 horas de duración cada una), en las cuales analizaron casos clínicos sobre las lesiones deportivas más frecuentes. Se llevaron a cabo dos tipos de actividades, una individual y una grupal. En la individual, los residentes realizaban una revisión bibliográfica sobre el problema con base a una guía de discusión, mientras que en la grupal, argumentaban y contrastaban sus respuestas con las de sus compañeros bajo la guía del profesor. Antes y después de la intervención se evaluó su aptitud clínica a través de seis indicadores: identificación de factores de riesgo, de signos y síntomas, uso global de medios diagnósticos, integración diagnóstica, establecimiento de tratamiento oportuno y de pronóstico de casos clínicos problematizados mediante un instrumento válido y con confiabilidad de 0.808, según la prueba Kuder Richardson.
Resultados. Se encontró un avance significativo en la aptitud global de los residentes posterior a la intervención (p=.011), específicamente en el indicador de uso de medios diagnósticos (p=.017); sin embargo, la mejoría en el nivel de aptitud clínica fue leve.
Conclusión. Un ambiente educativo basado en la discusión de casos clínicos problematizados incrementó, de manera leve, la aptitud clínica global de médicos residentes, específicamente en el uso de medios diagnósticos.